Valle de las Reinas
En el Valle de las Reinas se han descubierto más de 60 tumbas, aunque actualmente y por diferentes razones, solo tres o cuatro están abiertas al público. Este Valle tan peculiar fue descubierto por el italiano Ernesto Schiaparelli durante una excavación que se llevó a cabo en la primera década del siglo XX.
Al igual que en el Valle de los Reyes todos deseaban conocer la tumba de Tutankamón, en el Valle de las Reinas la estrella es la tumba de Nefertari. Este lugar nos pareció espectacular, no tiene la misma fama que el de los Reyes, pero es imprescindible visitarlo. Al estar muy cerca de Lúxor, solo a siete kilómetros, es sencillo realizar esta visita y programarla dentro de la ruta.
Visitando el Valle de las Reinas
La tumba de Nefertari fue construida en el año 1290. El famoso Ramsés II la mandó a edificar para una de sus esposas predilectas. Hay que tener cuidado, porque tiene épocas en las que está cerrada, no vaya a ser que vayáis de visita y os llevéis un disgusto. Es aconsejable programar todo con antelación con un guía para que el recorrido sea más entretenido.Cuando la visita se realiza de esta forma, se puede enlazar con otros monumentos, como el Valle de los Reyes, el Coloso de Memnon y el Templo de Hatshepsut, a nosotros este modo nos resultó más rentable y entretenido.
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Curiosidades
A continuación enumeramos otras tumbas de princesas, reinas y príncipes que allí se pueden encontrar, pues son las más populares en la zona:
- La tumba de la reina Ti: fue esposa de unos de los Ramsés, aunque se desconoce exactamente de cuál.
- La tumba del príncipe Amunkhopeshfu: era hijo del conocido Ramsés III y murió siendo muy joven, con solo 12 años. En esta tumba se aprecian unos bonitos relieves en los que aparece Ramsés III presentando sus hijos a los dioses, lo que es una muestra de cariño.
- La tumba del príncipe Kha-em-weset: este señor de nombre tan raro es otro hijo de Ramsés III, ha sido enterrado allí porque fue oficial de la guardia real.
Aunque no es igual que el Valle de los Reyes, a nosotros nos mereció la pena y pudimos ver dos tumbas que, si bien eran del mismo estilo que las demás, nos resultaron muy bonitas. Lo cierto es que le recomendamos a todos la visita, si tienen tiempo para ir.